Lunes, 08 de Agosto de 2011 -Protestas Por Bebe Muerta Por Horacio Cecchi / Página12
La
madre de la beba que murió en Ayacucho y denunció que había sido
asesinada por ladrones que la asaltaron en su casa, ayer reconoció que
había mentido. La denuncia de la mujer, a fines de julio, provocó dos
marchas, una violenta y con represión policial, en reclamo del
esclarecimiento del caso y de mayor seguridad. Pese a que algunas
informaciones periodísticas ayer catalogaban la confesión como un
“vuelco judicial”, el giro en el caso fue más bien periodístico, ya que
la confesión de la madre sólo vino a confirmar lo que ya se sabía (que
la beba no sufrió muerte violenta), mientras que a fin de julio buena
parte de los medios insuflaba ánimos alrededor del miedo y la
indignación.
El ministro de Interior, Florencio Randazzo, sostuvo que “por
cómo se presentó esa supuesta noticia, en Ayacucho se generaron dos
marchas contra la inseguridad repetidas infinidad de veces en los
grandes medios de comunicación”.
El
27 de julio pasado, Soledad Ibáñez, de 24 años, denunció que Antonia,
su beba de tres meses, había sido asfixiada por unos asaltantes que
habían entrado en su casa para robar mientras su marido, Juan Pablo
Olano, un productor rural, se encontraba en el campo y ella había
entrado en la ducha. Cuando salió, dijo, fue sorprendida por los
ladrones que la golpearon (mostraba un hematoma en un ojo). Y sostuvo
que como no podían hacer callar a la beba que lloraba incesantemente, le
taparon la boca con una frazada y la asfixiaron.
Desde
el primer día, la versión fue puesta en duda por las pruebas que iba
recogiendo la policía y que demostraban que no hubo violencia ni
faltaban objetos. De todos modos, durante la noche una marcha convocada
por el párroco del lugar, Miguel Ángel París, en reclamo de seguridad
generó más inseguridad que la que había vivido la población durante
décadas.
Mientras
algunos medios afirmaban con certeza que lo ocurrido había sido un
crimen en el marco de un robo, la multitud atacaba a pedradas al
intendente Darío David, del FPV, e intentaba entrar en su vivienda
provocando represión policial, gases, corridas, balas de goma.
Al
día siguiente, la causa judicial se afirmó en contradecir la denuncia
de la madre, con el resultado de la autopsia: señalaba que no existió
violencia en la muerte de la beba, que fue provocada por un
broncoespasmo. Pese a esta información, durante la noche se realizó una
nueva marcha por el esclarecimiento de un hecho ya casi esclarecido. La
marcha fue cubierta por la tevé que insistía en su propia versión:
“¿Usted tiene miedo señora?”, preguntó a una vecina que marchaba un
cronista de noticias enviado esa noche a cubrir la ola de inseguridad en
Ayacucho.
Finalmente,
se confirmó, el 27 de julio Ibáñez se decidió por emular a Nicole
Neumann, quien en abril de 2010 había inventado haber sido asaltada en
Quilmes y buena parte de los medios afirmaron con certeza que el hecho
había ocurrido y montaron sus títulos al galope sobre la inseguridad,
pese a que existía un testigo que ponía serias dudas a que todo hubiera
ocurrido.
Ayer,
luego de confiarle la verdad a su marido, Ibáñez se presentó a confesar
la Gran Nicole ante el fiscal de Dolores Diego Bensi. “La madre de la
nena –sostuvo Bensi– admitió que la hipótesis presentada al momento del
hecho fue inventada, ya que al encontrarse con esa escena devastadora
para ella no tuvo otra idea que inventar el asalto.” El fiscal sostuvo
con criterio que “no vamos a caer de lleno contra la madre”, “lo que
ocurrió con la muerte de la niña fue un accidente doméstico que lejos
está de cualquier investigación. Lo reprochable es haber falseado una
denuncia, por lo que ahora la mujer deberá atenerse a una investigación
penal”.
Lo dicho, no hubo giro en el caso judicial sino en el que vendieron algunos medios.
Comentarios
Publicar un comentario